El domingo 18 de marzo, decidimos ir a pasar el día a Faunia. Yaiza se levantó emocionada llamando a los pingüinos.
Fuimos tempranito y después de comer ya lo habiamos visto todo. He de decir que es una visita muy agradable y nada pesada.
Yaiza lo pasó bomba con las focas, loros, mariposas (¿de que color es?), monos...es maravilloso ver como todo les sorprende...que pena que con la edad perdamos esa capacidad de sorpresa y emoción.
Para muestra, un botón...algunas instantáneas de nuestra visita. Y una recomendación! No dejeis de visitar Faunia. Merece la pena!
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